El Sr. Albrecht Presidente de la Comisión Investigadora
del Congreso de Lava Jato es una persona comprometida en un contrato con
Odebrecht en el Callao y que por lo tanto su presencia en esa comisión
generaría un conflicto de interés.
También genera un conflicto de interés la presencia
de Mauricio Mulder que dijo que ponía las manos al fuego por Alan García, pero
que no quiere renunciar para nada a la comisión.
El Sr. Castro deslindando un poco del “chongo” ha
indicado que se queden ambos ahí porque “ya están nombrados”.
Pero es evidente que esa comisión es una comisión
política para ganar titulares y hacer un poco de presión. Pero el titular de la acción penal es el
fiscal, en este caso es el Fiscal Supra Provincial el Sr. Hamilton Castro,
nombrado para este trabajo.
La Procuraduría está contratando abogados
penalistas jóvenes, esos que pueden trabajar duro muchas horas. Está perfecto que fortalezcan.
El Estado peruano a través del Ministerio de
Justicia ha señalado que van a dar todos los fondos necesarios para que la
investigación llegue a buen puerto y eso también es bueno. Porque sin plata, no se viaja a Brasil, no se
extradita a nadie, no se contratan abogados en el extranjero. Es posible que el Estado peruano tenga que
contratar asesoría en los Estados Unidos, Suiza o Brasil para poder repatriar
lo que haya que repatriar.
Aparentemente, los juicios van a ser por obra, dado
el esquema en el que está trabajando la Fiscalía. Es decir, el Metro de Lima, Línea 1 y Línea
2, parece que va a ser un juicio en el que están todos los involucrados por ese
juicio y luego seguirán haciendo juicios por distintas obras, la otra obra
señalada en la manifestación que vino de los Estados Unidos es IIRSA SUR, que
compromete al gobierno de Toledo y de García.
Este último caso es interesante. El Caso Odebrecht
plantea que las coimas no son pagadas en dos o tres armadas, sino a lo largo de
varios años, por eso es que las coimas de IIRSA SUR se terminan de pagar bien
entrado el gobierno de Alan García, y las coimas del Metro de Lima, se terminan
de pagar bien entrado en el gobierno de Ollanta Humala. Parece que a los de Odebrecht les gustaba que
las coimas tuvieran traslape entre dos gobiernos (por las moscas), esa era la
forma de trabajar. Ese es un patrón de
conducta que en el Perú se comprueba en los dos casos.
Recordar
Odebrecht tiene 60 obras en el Perú desde 1979
(primera fue Charcani).
Cinco empresas constructoras brasileras vinculadas a la
operación Lava Jato están comprometidas con obra pública en el Perú (y privada),
que son Odebrecht, OAS, Andrade Gutierrez, Queiroz Galvao y Camargo Correa.
Éstas a su vez formaron consorcios unas con otras,
sobre todo para IIRSA SUR e IIRSA NORTE. Lo que es cierto es que estaban obligadas a consorciarse
con empresas peruanas, las cuales fueron varias.
Está demás decir que estas contratistas locales deben ser incorporadas
al proceso también y que éstas, a su vez, deben responder a lo que tengan que decir los
titulares de Odebrecht que están haciendo las incriminaciones.
Se entiende que estas incriminaciones no sólo deben
ser el dicho de una persona sino es el dicho acompañado de documentación,
e-mails, citas en lugares públicos o privados, muchas cosas que generen un
contexto y que esa prueba inicial, se convierta en prueba plena.
Nadie encuentra al asesino al lado del muerto con
la pistola humeante en la mano, mirando y diciendo “yo no fui”.
Fuente:
http://www.prensa.com/opinion/Omnisciente-corrupcion_0_4659284127.html
APM con RMP 25 01 2017
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