Llueve mucho, hay poca agua!

Huaycos. Es geológicamente lo que va a suceder.  Por la quebrada viene el huayco.  No se deben construir casas en la quebrada aunque no se hayan presentado huaycos en mucho tiempo.  

Entendamos que lo que ha sucedido una vez, volverá a suceder.

En esta época, tenemos mucho calor en la costa, tenemos mucha lluvia en la sierra. Los caudales de los ríos de la costa central se han incrementado notablemente por las lluvias. Es muy probable que hay un desborde de los ríos en las zonas más críticas.

Hay cuatro niveles de alerta. Estamos ya en el nivel 3. En cualquier momento estaremos en el nivel 4. Hay que estar alertas.

De tal manera que, los alcaldes que han trabajado limpiando los cauces durante el invierno, que han puesto tranqueras en las partes altas para atrapar las rocas más grandes, que han puesto mallas de protección, en resumen, que han hecho labores de prevención, van a obtener resultados.

Y una vez que termine la temporada de lluvias, tienen que volver a limpiar el cauce de los ríos todos los años. Siempre. Hay que hacerlo. Porque no hay ninguna posibilidad de que el huayco no pase por donde ya pasó antes. Somos un desierto cruzado por ríos

Ahora, ¿cómo se explica que llueva mucho y haya poca agua?

Pues, en todas las zonas altas de la sierra del Perú están agradeciendo que llueva porque todos los reservorios se llenan y de esta agua vamos a beber todo el año.  Pero llega un momento en que tiene tanta agua que se tiene que soltar y generar el desfogue correspondiente, por eso el río viene repleto.

Por lo tanto, se tiene que restringir el servicio para poder limpiar los reservorios.  Lo que en este momento está entrando a la Atarjea es un “puré de barro”.  Los filtros enormes que tiene la planta, deben ser limpiados a la brevedad. Eso implica cortes de agua y racionamiento. Paciencia.

Hay que cuidar el agua. Nada de carnavales, lavar el auto, jardín... Nada. Paciencia.

Si todos fuéramos solidarios, habría agua para todos.  

Cuidemos el agua.